En la noche portuaria todo es posible. Las formas se demorfan, las luces dibujan códigos de barras y los pies te llevan a escasos metros de la Ribeira, al Chez Dany, mientras el Duoru espera impaciente a que termines de cenar para poder seguir siendo retratado.
1 comentario:
Que fotos más chulas!
pero el sitio más...¿dónde es?
Publicar un comentario